Friday, October 1, 2010

... no es lo mismo pavo con mole que "turkey with moles"

Tenía hambre, ¡ya era hora del lunch! y vaya la sorpresa que me lleve. Normalmente como en la cafetería de mi edificio y la variedad deja mucho que desear. Por un lado tenemos el "grill" (lo engordador), la barra de ensaladas (lo desabrido), comida mediterránea (gyros, pitas y dolmas), pizzas, la isla del "especial" del día y como está de moda también hacen sándwich como la selección pero el pan no es Bimbo como ustedes comprenderán. El especial de día fue… ¡pavo con mole! El precio: $6.95. El contenido: 2 rebanadas de pavo, un cucharón de arroz y uno de frijoles. Al ver burro se me ofreció viaje y me decidí por el “Roasted turkey in mole (a rich spicy chili chocolate sauce) with a side of mexi-rice and beans.” Había también la opción de pollo; pero como buen mexicano y acostumbrado a comer solo pavo en Navidades pues lo pedí con guajolote para conmemorar que ya es viernes.
Antes que nada cabe mencionar algunas irregularidades con la preparación del dichoso platillo. A menos que los pavos generen unas pechugas del tamaño de un lechón la carne no provenía de un solo animal, mexi-rice se refiere a cualquier arroz que no sea blanco ni amarillo (ese es hindú) y que haga la finta de que le pusieron algo de jitomate. ¡Olvídense del chicharito, elotito o zanahoria! Eso no se usa. Los frijoles también tienen su chiste, ni bayos, ni negros. Eran más como frijoles pintos pero primermundistas. Ordenados y uniformes a diferencia del frijol pinto mexicano donde cada uno hace lo que se le dé la gana. Supongo que de ahí viene la expresión del “mal del pinto”. Acá le decimos “vitíligo” y cuando te da pasas de ser un muchachito negro cantando con sus hermanos al Rey del Pop, blanco como tlaconete, rarito y un poco desabrido. En cambio en México lo único que te vuelves es la botana de tus amigos.
El embutido de pavo y el mole estaban bastante aceptables. Doña María o similar sin duda, no creo que Andrew sepa hacer mole desde el principio. Los frijoles sabían a algo más que frijoles. De alguna manera en la cafetería logran que el cilantro se torne amargo y el arroz de mexi no tenía nada. Era más bien como si tomaron una sopa de cebada y decidieron drenarla de todo líquido y sabor. Después de todo esto aprendí varias cosas hoy… las personas privilegiadas pueden ir a Sanborns por su molito, mal hecho el arroz sabe a cebada y Michael Jackson se murió con las nalgas negras. Y para muestra falta un botón.

2 comments:

  1. la pròxima vez que vengas te llevas unos sobrecitos de arroz a la mexicana y hasta le puedes añadir chìcharos verdes previamente cocidos en agua hirviendo. Tambièn no te olvides de llevarte tus molitos doña Marìa...con referencia a Michael Jackson, ahora cada vez que vea frijoles pintos, se va a revolcar en su tumba el pobre por tu culpa porque me voy a estar acordando de sus nalgas...

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  2. Hum. Nunca me había puesto a pensar en las nalgas de la gente que sufre de vitiligo. Ojalá no lo hubiera hecho.

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